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FILÁNTROPO

Hagamos una sociedad mejor

La igualdad de oportunidades era algo que preocupaba mucho a Luis Valls. Estaba convencido de que no puede haber una sociedad justa donde esta igualdad no es un hecho. Considerado por muchos como una utopía inalcanzable a nivel global, Luis Valls supo hacerlo real a nivel personal: fue un reto actualizado persona a persona, de modo factible, cercano, en lo concreto.

Historias de personas

Para muestra, esta anécdota1 que relata Ángel Rivera, quien fue durante años director de gabinete de Luis Valls y actualmente ostenta el cargo de consejero delegado de Santander España:

“Un día me comentó si había leído un artículo publicado en El País en el que se hablaba sobre la acción de unos subasteros que habían arrebatado una vivienda a un matrimonio de un municipio del sur de Madrid. Una vez leído, le comenté: menuda faena.

Sería conveniente ayudarles, me dijo -nunca le escuché una orden directa. Y eso hicimos, con dinero, abogados… En definitiva, con discreción, que era como le gustaba hacer las cosas. Nos costó trabajo porque los afectados no se creían que él no quisiese nada a cambio, ni siquiera que se lo dijeran a la periodista que había escrito el artículo.

Hoy viven tranquilos en una casa de su propiedad. Por lealtad y discreción no contaré más, aunque fácilmente llenaría páginas sobre este tipo de acciones”.

Miguel Ángel Prieto, que también fue su director de gabinete y actualmente dirige el Banco de Depósitos, tiene otras historias:

“Le interesaban mucho los casos relacionados con los chicos de barrio con problemas de droga. Quería que salieran de ese ambiente y estudiaran, para lo cual entró en contacto con Enrique de Castro, conocido como el “cura rojo”, que llevaba a cabo una labor importante con los jóvenes de Vallecas.
Otras veces era, por ejemplo, un grupo de enfermeras que iban a Cuba en sus vacaciones para enseñar allí a otras y necesitaban financiación para el viaje y la estancia… Y, por supuesto, una de sus apuestas más especiales fue el proyecto de la Ciudad de los Muchachos de Leganés (CEMU). Solicitaron ayuda y allí se presentó Luis Valls para ver qué ambiente había. El responsable era el conocido tío Alberto, con el que se entrevistó muchas veces antes de entregar el dinero y del que se hizo amigo con el tiempo”
.

Dinero para hacer el bien

Es sabido que Luis Valls, a pesar de tener uno de los sueldos más bajos de todos los presidentes de entidades financieras españolas, donaba gran parte de él a fundaciones a través de las cuales pretendía ampliar las oportunidades de las personas.

Él se encargaba personalmente de las peticiones que llegaban a su despacho. Todas, absolutamente todas las peticiones se respondían, aunque fuera para decir que no, algo que resultaba trabajoso pero que Luis Valls consideraba imprescindible. Muchísimas veces dijo que sí. Para eso estaba el dinero y para eso estaban las fundaciones (de las que nunca era presidente ni patrono pero cuya actividad seguía de cerca, interviniendo en su financiación).

Un sacerdote que le conoció bien, José Alcázar Godoy2, comprendió desde el principio el porqué de actuar así y lo explicó de este modo: “Luis Valls pensaba que cuando se utiliza para el bien, el dinero resulta un instrumento válido, porque impulsa el progreso de la sociedad, mejora la calidad de vida de las personas, permite crear obras artísticas, construir iglesias, universidades, carreteras y viviendas.

Luis nunca amó el dinero, sino el bien que con él podía hacerse, en primer lugar, a los empleados de la Entidad y, luego, a todos los demás”.

Generosidad con discreción

Sin alharacas. Así es como le gustaba ayudar a Luis Valls. Así pretendía hacer de esta sociedad un lugar mejor: sin publicidad, sin usar su nombre ni su imagen. Lo cuenta el periodista Juan Pablo Villanueva en una tribuna3: “Era generoso y atendía la indigencia y necesidades de muchas y variadas gentes. Sin alharacas, encauzó la responsabilidad social del banco y pilotó sus atenciones sociales a través de fundaciones creadas para ese fin”.

Bibliografía

(1) Artículo IN MEMORIAM – A Luis Valls escrito por Ángel Rivera, que fue secretario de Luis Valls, actualmente consejero delegado de Santander España, en Expansión (27/02/2006).

(2) Folleto Luis Valls. De la banca a Dios (José Alcázar Godoy).

(3) Gaceta de los Negocios (27/02/2006)

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